(nota: Este diario de viaje es una traducción del gallego, por lo que puede contener errores)
Diario de viaje a Escocia e Irlanda en coche desde Lugo, haciendo el recorrido que se puede ver en el mapa:
¿POR QUE ES ESTE UN VIAJE DIFERENTE?
Un mes es el tiempo que disponemos para recorrer estos dos países. Un mes que queremos aprovechar al máximo, y no entendemos aprovechar en el sentido de ver muchos lugares de interés turístico, sino como disfrutar el viaje, sin rutas establecidas, sin horarios y reservando sólo lo necesario, o lo que es lo mismo, haciendo lo que nos apetezca en cada momento, y sin seguir mucho los itinerarios y lugares de interés marcados por las guías turísticas. Va a ser un viaje bastante diferente a otros muchos que hicimos, en los que nos dejábamos llevar más por ver “a donde tienen que ir todos los turistas”, es decir, donde nos mandan las guías de turismo. No es que esté en desacuerdo con este tipo de viajes, pero esta vez queríamos un viaje diferente, donde las guías de turismo (que también llevábamos) sólo nos sirvieran como una recomendación, una mera fuente de información, pero después nosotros haríamos lo que quisiésemos. También es un viaje diferente al que hicimos al año anterior; el viaje al Cabo Norte en coche (http://cabonorte.wordpress.com/2009/12/20/viaje-al-cabo-norte-en-castellano/) que tantas entradas tiene en este blog. Es diferente porque la razón de ese viaje era un objetivo: Llegar al Cabo Norte; esa era la razón fundamental del viaje, cumplir el sueño de llegar a ese lugar; las muchas horas de coche que pasamos para lograr ese objetivo no restó en absoluto la magia de ese viaje. Fue un viaje también diferente, y excepcional.
Por lo tanto, si queréis información de los lugares turísticos para visitar aprovechando al máximo posible el tiempo, os recomiendo que compréis unas de las excelentes guías turísticas que hay en el mercado (El País Aguilar, Lonely Planet, Guías Azules, etc…), así como consultar muchas páginas web donde podéis encontrar mucha información de estes lugares; pero si además queréis conocer Escocia e Irlanda de otra manera, de una forma distinta (por lo menos para mí) , podéis leer el diario de viaje de mi recorrido, reflejando mi visión de los paisajes, de las poblaciones turísticas…y no turísticas, de los lugares que más me llegaron, de los alojamientos más y menos acogedores, de los bares donde merece la pena tomarse unas cuantas pintas…
EL VIAJE
Para mí empezar un viaje saliendo de casa al aeropuerto, meterme en el avión, y aparecer al cabo de unas horas en el lugar de destino, me pierde parte de la esencia del viaje. Por eso siempre que puedo, me gusta llegar al destino poco a poco, en varias etapas, porque soy de los que piensan que el viaje no es sólo llegar al destino, sino de disfrutar del camino. Por esta razón hicimos el viaje en mi coche, en el cual salimos de casa hasta Bilbo, donde cogimos el ferry hasta Portsmouth (Inglaterra). Desde allí, fuimos en coche hasta Escocia y pasamos allí 11 días. Después, cogimos otro ferry a Irlanda para disfrutar de otros 11 días hasta que embarcamos en un tercer ferry hasta Roscoff, en la Bretaña, y desde allí de vuelta a casa por carretera. El recorrido lo describiré a modo de diario de viaje, es decir, comentándolo día por día, incluyendo además todos los datos de kilómetros recorridos, alojamientos y precios de todo lo gastado día por día para dos personas, haciéndolo todo más ameno con fotografías que hice en el viaje.
28 DE JULIO: COMIENZA EL VIAJE
Lugo – Bilbo
El ferry hasta Portsmouth nos salía de Bilbo el día 29 a la 1 de la tarde, esa es la razón por la cual empezamos el viaje el día anterior. Así que ese día aprovechamos la mañana para acabar de preparar el equipaje y hacer algunas gestiones relacionadas con el viaje. Salimos después de comer e hicimos los casi 500 kilómetros hasta Bilbo, donde llegamos ya de noche. Dormimos en un hotel Formule 1, cadena de hoteles muy famosa en Francia, donde por sólo 35€ tienes una habitación doble bastante bien equipada, aunque con baño compartido.
-Gastos pagados en el día: (105€ en total)
Gasóleo: 52€
Cena (Hotel Ibis): 18€
Alojamiento: Formule 1 Barakaldo: 35€
-Km recorridos en el día: 483 km
29 DE JULIO: “PRIDE OF BILBAO”
Bilbo – ferry “Pride of Bilbao”
Como el ferry no sale hasta la 1 de la tarde, aún podemos desayunar tranquilamente y hacer unas compras en un centro comercial próximo al hotel, sobre todo para comprar provisiones, ya que según nos comentaron la comida en el ferry es cara y no muy buena para lo cual estamos acostumbrados, así que más vale hacer un buen desayuno y subsistir después algo más de 24 horas a bocadillos y fruta. También aprovechamos para llenar el depósito, ya que el gasóleo en el Reino Unido es más caro.
Con una hora de adelanto llegamos al puerto de Santurtzi, concretamente hasta el espigón número 3, que es donde sale el ferry y que está muy bien señalizado, ya desde la autopista A8. Después de aparcar el coche en la bodega, dejamos el equipaje en el camarote (una vez que el barco sale, no se puede bajar al coche).
El barco sale puntual, y poco después de partir, una vez que nos alejamos de tierra, bajamos al camarote. Escogimos un camarote doble y exterior, ya que pasar las 29 horas previstas en el barco en un camarote interior se hace algo claustrofóbico, y además, la diferencia de precio no era mucha. Pagamos en total 487€, que incluye el billete para 2 adultos, el coche y el camarote exterior, y que no lo consideramos excesivo teniendo en cuenta que los dos ferries que salían desde Santander eran más caros
Como tengo la suerte de no marearme, disfruto mucho del tiempo que paso en el barco. Me dedico sobre todo a leer, y de vez en cuando echar un vistazo al mar por el ojo de buey de nuestro camarote, en el lado de estribor. A veces vamos a dar un paseo por el barco, donde compramos algún refresco y dulces en la tienda libre de impuestos, así como una pegatina para adaptar la luz de los faros a las carreteras de las islas, para no deslumbrar a los coches que vienen de frente. También aprovechamos para ir a la cubierta a ver el mar, donde ya no se ve nada de tierra alrededor, y donde contemplamos una hermosa puesta de sol.
-Gastos pagados en el día: (En total 541€ + 11.78£)
Gasóleo: 30€
Desayuno: 9.50€
Supermercado: 14.50€
Billete del Pride of Bilbao: 487€
Adaptador de faros: 7.99£
Otros: 3.79£
-Km recorridos en el día: 15 km
30 DE JULIO: A PARTIR DE AHORA, A CONDUCIR POR LA IZQUIERDA
Ferry “Pride of Bilbao” – Portsmouth – Stonehenge – Amesbury
La hora prevista de llegada a Portsmouth es a las 17:15 hora británica (1 hora menos que en el continente), y alrededor de las seis de la tarde ya estabamos con el coche en la carretera. Como nunca había conducido por la izquierda, iba con mucho cuidado, sobre todo en los cruces y en las rotondas. Por autovía y por carreteras convencionales pienso que es bastante fácil adaptarse.
Queríamos ver el famoso monumento megalítico de Stonehenge, así que decidimos ir directamente hasta allí, y después cenar y dormir en la población más próxima: Amesbury.
Llegamos a la entrada para visitar Stonehenge justo a la hora de cierre y ya no nos dejaron pasar. Aprovechamos entonces para dar un paseo por los alrededores, desde donde se puede observar también el complejo megalítico
En Amesbury, dormimos en un típico bed and breakfast (B&B), llamado Catkin-lodge (http://www.catkinlodge.fsnet.co.uk/), por 65£. Como es habitual en este tipo de alojamiento incluye, aparte de una cómoda habitación doble con baño, un magnífico desayuno.
-Gastos pagados en el día: (En total 15.4£)
Cena: 2 pizzas, 1 ensalada, 2 refrescos (King Pizza chicken, Amesbury): 11.40£
Otros: 4£
-Km recorridos en el día: 100 km
31 DE JULIO: RUMBO A ESCOCIA
Amesbury – Stirling
Nada mejor que empezar el día con un buen desayuno, cosa que en los bed and breakfast (B&B) está casi siempre asegurado. Suelen incluir el típico desayuno inglés, compuesto principalmente por tocino, huevos, habas, salchichas, tomate, … así como cereales, tostadas, yogur, algo de fruta y té o café. Como para nosotros resulta un poco fuerte, nos conformamos con repetir cereales y tostadas y no tomar nada de “cocinado”.
Salimos temprano hacia el norte, ya que queríamos llegar hasta Stirling (Escocia) por la tarde. Durante los primeros kilómetros, la carretera era estrecha y sin arcén, y con abundantes cruces y rotondas, que no estaba nada mal para irse acostumbrando a conducir por la izquierda. Poco antes de Birmingham nos incorporamos a la M5, y continuamos hasta Stirling todo por autopista, sin demasiado tráfico salvo en las cercanías de Liverpool y Manchester.
Alrededor de las cinco de la tarde llegamos a Stirling, donde habíamos reservado para cuatro noches un B&B que encontramos en internet donde nos dejaban utilizar la cocina (Ryneemar B&B http://www.ryneemar.co.uk/). Cuando llegamos no había nadie, así que aprovechamos para ir hasta el centro de Stirling para dar un paseo y hacer algunas compras para la cena. Después volvimos al B&B, donde conocemos a nuestros anfitriones (Laura y George) que nos cayeron bien ya desde el primer minuto. Nos enseñaron la habitación y el funcionamiento de la cocina y a los pocos minutos ya estábamos cocinando y cenando, ya que después de los kilómetros que habíamos hecho teníamos bastante hambre.
Después de cenar fuimos a dar un paseo y a tomar unas cañas, pues ya teníamos ganas de entrar en algún pub escocés. En el primero tomamos una Tennent’s “small” y en el segundo una “large”, más o menos el doble que la anterior: bastante suaves pero muy ricas.
-Gastos pagados en el día: (En total 80.32£)
B&B Catkin-lodge, Amesbury: 65£
Supermercado (Lidl, Stirling): 7.02£
Cañas: 8.30£
-Km recorridos en el día: 656 km
1 DE AGOSTO: “GAMES” EN LAS TROSSACHS
Stirling – Callender – The Trossachs – Luss– Stirling
Hoy decidimos dedicar el día a conocer el Parque Nacional The Trossachs, ya que nos apetece pasear por algún espacio natural y de paso quemar las calorías del buen desayuno que nos preparó Laura. A poca distancia de Stirling, a las puertas del Parque Nacional, paramos en Callender. Allí, justo en la entrada del Rob Roy Centre (que no visitamos) está la oficina de turismo, donde pedimos información de alguna ruta por el Parque Nacional, y donde nos dijeron que ese mismo día se iba a celebrar allí unos “Highland Games”, es decir, una fiesta con típicos juegos escoceses, que desde luego no quisimos perdernos.
Pero antes de que empezaran los juegos, nos dio tiempo para hacer una caminata hasta un monte próximo donde se disfruta una buena panorámica de Callender y alrededores.
La subida al monte fue corta pero intensa, pero no vino mal para quemar parte del desayuno. Una vez de vuelta al pueblo, ya había ambiente de fiesta, con varias bandas de pasacalles con gaitas que seguimos hasta un lugar de las afueras donde se iban a desarrollar los juegos.
Para poder ver los juegos tuvimos que dar una donación “voluntaria” para beneficencia de 8£ por persona (sí o sí) y una vez dentro llama la atención un gran campo de juegos en el centro, rodeado de múltiples barracas de feria, alguna tienda, un bar y varios lugares donde te servían todo tipo de comida basura. También había una campa donde se exhibían perros policía.
Como dice el refrán “allí donde fueres haz lo que vieres” así que, como hacía todo el mundo allí dentro, nos pusimos a ver los juegos después de pedir unas cervezas en el bar, y mientras tomábamos algo de una pésima comida basura. Como era de esperar en unos juegos escoceses, suponían una clara demostración de fuerza y no mucha táctica, así por ejemplo pudimos observar varios tipos de lanzamientos de pesos y troncos, así como de levantamiento de piedras.
Para amenizar los juegos, había en un extremo del campo un palco donde actuaban grupos de bailes regionales, sobre todo escoceses. Fue una buena forma de pasar una buena parte del día, así que ya entrada la tarde seguimos camino al interior de las Trossachs. La primera parada, a muy pocos kilómetros de Callender es el Loch (es así como llaman los escoceses a los lagos) Katrine, hermoso lago dentro del Parque Nacional donde se pode dar un paseo alrededor o una vuelta en barco (nosotros no hicimos nada de eso, ya que era bastante tarde).
Para acabar el recorrido de ese día, visitamos el siguiente loch, el Loch Lomond, un poco más al este, haciendo una parada en una aldea al lado del lago: Luss.
Llegamos de vuelta a nuestro B&B de Stirling ya casi de noche, donde cenamos nada más llegar acompañados de Laura, con quien nos sentimos muy a gusto. Después de cenar nos dedicamos al que sería nuestro ritual casi todos las noches del viaje: un paseo y unas cañas en algún pub próximo, para acercarnos más al modo de vivir de los autóctonos.
-Gastos pagados en el día: (En total 76.70£)
Gasóleo: 47£
Entradas Highland Games en Callander: 16£
Comida basura en los Games: 4£
Cañas: 9.70£
-Km recorridos en el día: 165 km
2 DE AGOSTO: LA COSTA DE EAST NEUK
Stirling – St Andrews – East Neuk – Culross – Falkirk Wheel – Stirling
Como ayer estuvimos en la montaña, hoy decidimos visitar la costa, aunque como es bien sabido hablar de costa aquí no se puede relacionar en absoluto con sol y playa. Nuestra primera parada del día la hicimos en St Andrews, una de las poblaciones más interesantes de Escocia a nivel histórico. Aunque la catedral (que en su tiempo parece ser que fue la más grande de Escocia) y el castillo están en ruinas, su universidad sigue en funcionamiento en la actualidad.
Siguiendo la carretera de la costa hacia el sur entramos en la parte norte del Firth of Forth (estuario donde desemboca el Río Forth, en la cual a su orilla está la ciudad de Edimburgo), conocida con el nombre de East Neuk. Entre los pueblos de pescadores que hay en este tramo de costa destaca St Monans y, más en el interior, Culross.
De camino de vuelta a Stirling aprovechamos para ver el funcionamiento de la esclusa giratoria Rueda de Falkirk (Falkirk Wheel), que se utiliza como ascensor de los barcos que navegan por el canal. En este enlace se puede ver el funcionamiento: http://es.wikipedia.org/wiki/Archivo:Falkrikwheelanimationmedium.gif
Al lado de Stirling, en un alto donde hay una excelente vista de la ciudad, está el Monumento Nacional William Wallace, donde se guarda la que dicen que era su espada de batalla. Nosotros no visitamos el interior, porque ya había cerrado y, además, oímos que no valía la pena.
Finalmente, paseo por las calles de Stirling y su castillo, acabando el día tomando unas cañas en los pubs de la zona.
-Gastos pagados en el día: (En total 18.04£)
Café en St Andrews: 2.10£
Supermercado (St Andrews): 10.24£
Cañas: 5.70£
-Km recorridos en el día: 269 km
3 DE AGOSTO: EDIMBURGO
Stirling – Edimburgo – Stirling
Estando tan cerca de la capital de Escocia (unos 50 km) casi sería un delito no conocer Edimburgo, así que este fue el día que escogimos para visitar esta famosa ciudad. Cuando le dijimos a Laura que íbamos en coche nos dijo que la mejor forma de ir a Edimburgo era en tren, que nos dejaba ya en el mismo centro de la ciudad, y así no nos teníamos que preocupar por conducir y aparcar. Se ofreció, además, a llevarnos hasta la estación de tren de Stirling en su coche.
Y siguiendo los consejos de Laura así hicimos. Nos llevó a la estación de tren y, nada más comprar los billetes, ya nos salió al tren que en más o menos una hora nos dejaba en el centro de Edimburgo. Fuimos hacia el centro, concretamente a la famosa Royal Mile y alrededores, acercándonos hasta la entrada misma del castillo. La indiscutible belleza de la ciudad se ve eclipsada por la gran cantidad de turistas que llenan las calles y los lugares de interés turístico como el castillo, donde la cola de entrada es enorme. Es lógico, Edimburgo es un destino turístico de moda, y además estamos en pleno verano, y por si fuera poco durante todo el mes de agosto se celebra su famoso festival. Pero esta saturación turística le resta encanto a la ciudad. Quizás sea mejor visitarla en invierno.
Escapando de los turistas que invadían el centro, llegamos a Calton Hill. Las magníficas vistas de la ciudad que hay desde aquí hacen de este lugar mi favorito de Edimburgo.
Aprovechando que estamos en una ciudad de tamaño considerable (unos 400.000 habitantes) con gran cantidad de servicios, decidimos buscar un restaurante italiano para descansar el cuerpo de la terrible comida local. El Martone, cerca del Calton Hill, fue una elección estupenda. Después, pasamos la tarde paseando por la New Town y alguna zona de la parte vieja que no vimos por la mañana.
Bien entrada la tarde cogimos el tren de vuelta a la tranquilidad de Stirling. Ya echaba de menos volver a oír hablar inglés en las calles (pienso que en Edimburgo escuché todos los idiomas de la tierra), tomarme una caña en un pub donde, después de cuatro días por aquí ya no eres un desconocido, y, para acabar el día, cenar tranquilamente en el B&B mientras hablamos con Laura. Desde luego, estuvimos muy a gusto en Stirling.
-Gastos pagados en el día: (En total 51£)
2 tickets de ida y vuelta a Edimburgo: 16£
Comida: Pizza, ensalada, cervezas y café (Martone, Edimburgo) 24.70£
Cañas (Stirling): 10.30£
-Km recorridos en el día: 0 km
4 DE AGOSTO: CITA CON LA NATURALEZA EN EL PARQUE NACIONAL DE LAS CAIRNGORMS
Stirling – Dunked – Aviemore – Parque Nacional de las Cairngorms – Boat of garten
Después de despedirnos de Laura y George, abandonamos Stirling y continuamos hacia el norte. Los siguientes días queremos dedicarnos a recorrer toda la costa norte de las Highlands, desde Inverness hasta la Isla de Skye, parando a dormir dónde nos apetezca. Seguimos pues, la carretera A9 cara Inverness, y a no muchos kilómetros de Stirling visitamos la localidad de Dunkeld, donde hacemos un descanso y vemos las ruinas de la antigua iglesia.
Un poco más al norte, decidimos buscar un sitio donde dormir cerca del Parque Nacional de las Cairngorms. Comenzamos a buscar en Aviemore, una especie de localidad – resort, orientada claramente a dar servicios a las estaciones de esquí próximas en invierno, y algunos excursionistas en verano. Es, por lo tanto, una población bastante fea y sin personalidad, por lo que seguimos buscando por los alrededores un lugar que nos convenza más. Ese lugar fue Boat of Garten. Allí encontramos también un B&B que nos gustó al instante.
Así que después de comer algo, nos dirigimos a ver un poco el corazón de este Parque Nacional. Primero, dentro del Glenmore Forest Park, nos acercamos hasta la estación de esquí donde se encuentran los picos de mayor altitud, y donde aún en esta época del año se pueden ver algunos neveros. Después dimos un paseo alrededor del Loch (es así como llaman los lagos en Escocia) Morlich, donde había bastante gente disfrutando de la playa de alrededor e incluso bañándose, aunque la temperatura no era muy agradable.
Como hoy teníamos ganas de andar, seguimos buscando más lugares donde pasear por el parque, y continuamos por las orillas del Loch Garten, para mi gusto mucho más bonito y tranquilo que el anterior loch, ya que es raro que te encuentres con gente. Sin duda, es un buen lugar para relajarse durante el viaje.
De vuelta a Boat of Garten, cenamos en el que creemos que es el único restaurante de la localidad: el Andersons Restaurant, con comida de calidad (cosa rara por estas tierras), aunque algo caro.
-Gastos pagados en el día: (En total 298.67£)
B&B Ryneemar, Stirling (4 noches): 240£ + 10£ de propina
Supermercado (Boat of Garten) 3.07£
Cena: 2 platos de pescado, 1 botella vino, postre y café (Andersons,Boat of Garten): 42.90£
Otros: 2.70£
-Km recorridos en el día: 267 km
5 DE AGOSTO: EL NORTE DE LAS HIGHLANDS
Boat of garten – John O’Groats – Dunned Head – Melvich
Con mucho gusto nos quedaríamos unos días más en Boat of Garten, aunque sólo fuera por hablar más con los encantadores Val y John, los propietarios del B&B Steornabhagh (http://www.bnbselect.com/bnb/34528). Pero el viaje continúa, y queremos seguir hacia la costa norte de las Highlands.
Poco después de pasar Inverness, la carretera A9 va bordeando la costa, haciendo el viaje más ameno. Alrededor del mediodía llegamos al que se dice el punto más septentrional de las Islas Británicas: John O’Groats. Este famoso lugar no es que tenga nada en particular, salvo la fama que lleva millares de turistas cada año. En realidad el paisaje es más bonito cerca de allí, en Dunnet Head, a donde llegan pocos visitantes , y donde sí que es en realidad el punto más septentrional de las Islas Británicas. Justo enfrente de esta costa podemos ver las Islas Orcadas.
Continuando por la costa, decidimos buscar un sitio donde pasar la noche cuando pasábamos por Melvich, ya que nos gustó mucho su entorno. Encontramos el B&B The Sheiling (http://thesheilingbandb.com/), situado en un alto con buenas vistas.
En Melvich, Bighouse es un buen lugar para pasear, situado en la desembocadura de un río que acaba en una playa. Después, para relajarnos más aún, fuimos tomar algo y cenar unas lasañas muy ricas al Halladale Inn, al lado de nuestro B&B.
-Gastos pagados en el día: (En total 148.48£)
B&B Steornabhagh, Boat of Garten: 58£ + 2£ de propina
Gasóleo: 52£
Supermercado + pan (Wick): 5.88£
Cena: 2 lasañas y 3 cervezas (Halladale Inn, Melvich): 25£
Cañas: 5.60£
-Km recorridos en el día: 314 km
6 DE AGOSTO: “PASSING PLACE”
Melvich – Ullapool
A partir de Melvich, continuamos por la carretera de la costa rumbo al Oeste y después hacia el sur, yendo siempre cerca del mar. Para mí, los paisajes desde aquí hasta la Isla de Skye son los más hermosos del viaje. Me recuerdan un poco los de Noruega que vi el año anterior. Lugares como Kyle of Tongue, Loch Eriboll, Kyle of Durness, etc… merecen la pena para parar un rato el coche para contemplar el paisaje.
Además, una parada de vez en cuando viene bien para descansar un poco de esta carretera, ya que es muy estrecha y está llena de “Passing place”, que consisten en pequeños ensanchamientos de la carretera donde parar el coche mientras esperas a que pase el que viene de frente, ya que estas vías son tan estrechas que sólo coge un turismo.
Después de pasar Durness, la carretera nos dirige hacia el sur con paisajes igual de espectaculares, ya sean de costa o a veces de interior, donde son frecuentes los loch (lagos o fiordos). En el Loch Assynt podemos ver las ruinas del Ardvreck Castle.
Después de unos 200 km de carreteras estrechas y de cientos de passing place, decidimos parar a buscar dónde dormir en Ullapool. Son más o menos las dos de la tarde y comenzamos en busca de un B&B para pasar la noche y, cosa que nunca nos pasó hasta ahora, estaban todos con el cartel de “no vacancies”, es decir, completos. Ya pensábamos en dormir en el camping hasta que encontramos uno donde tenían una habitación libre (pienso que la última que quedaba en Ullapool), y allí nos quedamos (B&B Fyffe House ).
Ullapool está en la orilla del Loch Broom, y es desde donde salen los ferries para Stornoway, en las Islas Hébridas. Los mejores lugares para contemplar el Loch Broom son desde el Faro Rhue (a muy pocos kilómetros en coche desde Ullapool), o bien desde el mismo monte de Ullapool, desde donde sale una ruta de senderismo bastante corta, de la que te dan información en la oficina de turismo de la localidad. Las vistas desde lo alto merecen la pena.
Para acabar el día, unas cañas en los pubs y un “fish and chips” (pescado con patatas, ambos fritos y de bajísima calidad) para cenar.
-Gastos pagados en el día: (En total 89.33£)
B&B The Sheiling, Melvich: 64£
Supermercado (Ullapool): 8.33£
Cena: Fish and chips (Ullapool): 5.60£
Cañas: 11.40£
-Km recorridos en el día: 216 km
7 DE AGOSTO: EL ROBO DE BANK OF SCOTLAND
Ullapool – Portree
Como hacemos siempre, de vez en cuando miramos por internet los gastos y lo que nos queda en la cuenta corriente que utilizamos para los viajes. Pero de esta vez llevamos una sorpresa: El día anterior, íbamos a retirar 100 libras en un cajero del Bank of Scotland de Ullapool, pero antes de aceptar la operación, la anulamos para retirar posteriormente 150 libras, ya que queríamos sacar algo más de dinero. Total, que hoy vimos que nos cargan en la cuenta las 150 libras que sacamos en el cajero, como es lógico, más también las 100 libras de la operación que anulamos. Llamamos al servicio de atención al cliente de nuestra caja y no nos solucionaron nada, así que decidimos ir directamente al Bank of Scotland al próximo lunes (hoy es sábado) a ver que nos dicen. No andamos nada sobrados de dinero, por eso estos “errores” de los bancos nos cabrean un poco.
Seguimos después el viaje hacia el sur por la costa oeste de Escocia, siempre por carreteras al lado de la costa, pasando por lugares tan espectaculares como el Loch Torridon y Loch Carron. Ya por la tarde, llegamos a la localidad donde empieza el puente (antiguamente de peaje) que da acceso a la Isla de Skye: Kyle of Lochalsh. Nosotros, nada más cruzar al puente, nos dirigimos hasta Portree, a la capital de la isla.
Igual que cuando llegamos a Ullapool, todos los B&B de Portree tenían ya el cartel de “no vacancies”, por lo que de esta vez no encontramos ninguna habitación disponible. Tampoco tuvimos suerte en los albergues del centro. Y como no nos apetecía seguir buscando por las afueras, decidimos dormir en el camping de Portree (http://www.portreecampsite.co.uk/), cosa de la que después nos arrepentimos, ya que pasamos bastante frío por la noche. Para nuestro gusto, Escocia (y también Irlanda), no son lugares muy apropiados para acampar, ya que los veranos son bastante fríos y lluviosos.
Portree tiene muchos servicios para el turista: alojamientos, restaurantes, etc…, pero no es una localidad muy grande para asimilar tantos visitantes, por lo que para al tamaño que tiene, hay mucha gente (supongo que será así sólo en esta época del año). Por lo demás, no es nada fea, sobre todo en la zona del puerto.
Cogimos comida en un supermercado para cenar más tarde en el camping y después, celebramos mi cumpleaños tomando unas cañas en un pub de Portree. Celebrábamos también que ya llevábamos 11 días de viaje, y aún nos quedan muchos por delante.
-Gastos pagados en el día: (En total 89.33£)
B&B Fyffe House, Ullapool: 60£
Supermercado (Kyle of Lochalsh y Portree): 8.97£
Cañas: 6£
Otros: 3.06£
-Km recorridos en el día: 278 km
8 DE AGOSTO: LA ISLA DE SKYE
Portree – Neist Point – Kyleakin
Hoy vamos a dedicar el día a recorrer la Isla de Skye, famosa por ser una de las islas más hermosas de Escocia. Saliendo de Portree hacia el norte, lo primero que encontramos es el Storr, que cuenta con un entorno de gran belleza por sus formaciones rocosas, lochs y acantilados.
Poco después, siguiendo la A 855, están las ruinas del Duntulm Castle, situado al lado de un acantilado con vistas a las Islas Hébridas. Continuando por las carreteras más próximas a la costa, llegamos hasta otro lugar con excelentes vistas: el Neist Point, el punto más occidental de la isla.
La costa tiene paisajes muy hermosos, pero el interior no se queda atrás, como las montañas de Cuillin, que llegan a tener casi 1000 metros de altitud.
Decidimos pasar esta última noche en la Isla de Skye en Kyleakin, la población más próxima al puente que da acceso a la isla. Kyleakin es un lugar que vino a menos desde la construcción del puente, ya que antes era donde se cogía el ferry que llevaba hasta el “continente”. Es por lo contrario un lugar muy tranquilo y con bastantes servicios, entre los que destacan varios tipos de alojamiento. Nosotros de esta vez pasamos la noche en un albergue o hostel, (Skye Backpackers Hostel: http://skyebackpackers.com/)
Echábamos muchísimo de menos poder cocinar nuestra comida después de tantos días comiendo de bocadillos o la terrible comida que se acostumbra a tomar por aquí. Concretamente desde la casa de Laura, en Stirling, no tuvimos a mano una cocina. Por eso disfrutamos tanto de esta cena. Aprovechando la wifi del hostel, reservamos sitio en el ferry que nos llevaría a la Irlanda dentro de tres días, ya que aquí decidimos partir el viaje dedicándole los mismos días a Irlanda que a Escocia. De paso aprovechamos para avisar la Laura de que íbamos a pasar mañana la noche en su casa (nos apetecía volver a parar en Stirling de paso que nos dirigíamos hacia el sur).
-Gastos pagados en el día: (En total 51.77£)
Camping, Portree: 10£
Supermercado (Broadford): 5.97£
Skye Backpackers Hostel, Kyleakin: 30£
Cañas: 5.80£
-Km recorridos en el día: 205 km
9 DE AGOSTO: ATRAPADOS EN EL LAGO NESS
Kyleakin – Lago Ness – Fort Augustus – Fort William – Stirling
Nada más partir de kyleakin, cruzamos el puente que da acceso a la isla y paramos en Kyle of Lochalsh, a buscar una sucursal del Bank of Scotland para solucionar el problema de las 100 libras que nos cargaron de más en el cajero de Ullapool: Nos dijeron que no podían hacer nada y que se los reclamáramos a nuestro banco, o lo que es lo mismo, que no querían hacer nada.
Después, a poca distancia de Kyle of Lochalsh, paramos junto al castillo de Eilean Donan, mientras caía una intensa lluvia. Para mí, es el castillo más hermoso de los que vi en Escocia.
Nuestro siguiente objetivo era rodear el famoso Lago Ness, en el sentido contrario de las agujas del reloj, es decir, hacia el este por la orilla sur del lago y hacia el oeste por la norte. No era mala idea, ya que así podíamos ver todo el lago, si no fuese porque nos equivocamos de carretera donde la orilla sur, y la ruta alternativa por donde nos llevó el GPS resultó ser una pista de tierra, invadida por ovejas, y con unas curvas tan cerradas en la parte final, que el coche casi no podía tomar las curvas, y mucho menos dar la vuelta.
Mientras maniobraba para tomar las curvas, bajo un intenso olor a embrague y rueda quemada, pensé que si no saldríamos de allí por nuestros medios, la única forma de sacar el coche sería en helicóptero.
Tuvimos suerte y, como el camino no estaba excesivamente húmedo, conseguimos llegar hasta la carretera que bordea al lago. Desde allí, fuimos hasta Inverness, ciudad en el extremo este del lago, y después, de vuelta al oeste para rodear al lago por la parte norte, con muchos más visitantes que en la orilla sur, donde hay una especie de “centro turístico” sobre al lago Ness y su monstruo (no paramos), y las ruinas del Urqhart Castle, con un precio de la entrada desorbitado para ver unas ruinas.
Completamos la vuelta al Lago Ness en Fort Augustus, para mí el lugar más interesante de todo el lago. Aparte de ser una población con cierto encanto, cuenta con un sistema de esclusas para salvar al desnivel del Canal de Caledonia (que une la costa este de Escocia con la del oeste, pasando por el Lago Ness) que merece la pena ver en funcionamiento.
Desde Fort Augustus continuamos hacia Fort William, por una carretera que cruza alguna vez el Canal de Caledonia a través de puentes giratorias, donde se corta el tráfico cuando pasa un barco.
Hicimos una parada en Fort William para comprar algo para la cena en un supermercado y, aunque la ciudad no es que sea gran cosa, dar un paseo. Después, hicimos el camino de vuelta a Stirling, pasando por los hermosos paisajes del Glen Coe, llegando ya casi de noche al B&B de Laura y George.
-Gastos pagados en el día: (En total 42.26£)
Gasóleo: 35£
Supermercado (Fort Augustus): 3.13£
Supermercado (Fort William): 3.13£
Otros: 1£
-Km recorridos en el día: 425 km
10 DE AGOSTO: LA ÚLTIMA NOCHE EN ESCOCIA DE ESTE VIAJE
Stirling – Portpatrick
Después del desayuno y la despedida salimos de Stirling hacia el sur, con la intención de llegar a un lugar próximo a Stranraer, que es desde donde nos va a salir el ferry a Irlanda el día siguiente. Laura y George nos aconsejaron hacer una parada en el camino para visitar el castillo de Culzean, ya que pasábamos muy cerca. Y así hicimos.
Aún pasamos un buen rato paseando por los jardines que rodean el castillo, que cuenta además con un lago e incluso una pagoda. Después, continuamos por la A77 (por cierto, con un montón de radares de tramo) al lado de la costa, con buenas vistas al North Channel, mar que separa Irlanda de Escocia. Llegamos ya por la tarde a Stranraer, donde habíamos pensado buscar algún lugar para dormir. Como esta población no nos gustó mucho, decidimos seguir buscando algún B&B por alguna localidad próxima con más encanto, y la encontramos: Portpatrick.
En Portpatrick encontramos el Ard Choille Guest House (http://www.ardchoilleguesthouse.co.uk/) , otro típico B&B de los que ya estábamos acostumbrados a dormir en este viaje. Fue una buena forma de pasar nuestra última noche en Escocia de este viaje: En un bonito lugar, con un típico pub y B&B escocés.
-Gastos pagados en el día: (En total 135.78£)
B&B Ryneemar, Stirling: 60£
Gasóleo: 45£
Culzean Castle: 11£
Cena: The Downshine, Portpatrick 17.18£
1 caña: 2.60£
-Km recorridos en el día: 252 km
11 DE AGOSTO: REPUBLICANOS Y UNIONISTAS EN BELFAST
Portpatrick – Belfast – Ballycastle
Aunque Escocia nos gustó mucho, ya teníamos ganas de entrar en Irlanda, sobre todo sabiendo que ya estamos en el ecuador de nuestro viaje. Aprovechamos que teníamos que esperar el ferry en Stranraer para hacer algunas compras en el supermercado y para cambiar las libras escocesas que nos quedaban por libras británicas, ya que tenemos oído que hay sitios fuera de Escocia que no aceptan libras escocesas (y viceversa, en Escocia se puede encontrar también tiendas que no acepten las libras inglesas, aunque nosotros nunca tuvimos problemas en este sentido). Intentamos cambiarlos en dos bancos y, para nuestra sorpresa, en ambos nos dicen que no lo pueden hacer a no ser que tengamos una cuenta en ese banco. Increíble: si en un banco no puedes cambiar dinero, ¿en donde si no?
Finalmente, pedimos que nos las cambiaran en tres tiendas distintas, y en cada una de ellas nos canjearon las libras inglesas que tenían por escocesas sin ningún problema.
Puntuales, salimos de Stranraer en el ferry con destino a Belfast, en el Úlster, ya en la isla de Irlanda, sólo que bajo administración británica. El trayecto se hace en unas tres horas.
Belfast es una ciudad con un pasado reciente siempre en conflicto, ya que desde finales de los años 60 hasta no hace muchos años, sufrió con intensidad la lucha entre unionistas (partidarios de seguir perteneciendo a Gran Bretaña y mayoritariamente protestantes) y republicanos (partidarios de pertenecer a la República de Irlanda y mayoritariamente católicos). Aunque puede decirse que la violencia disminuyó enormemente después del Acuerdo de Viernes Santo de 1998, aun hoy en día sigue habiendo tensión entre estas comunidades. Decidimos visitar, pues, dos enclaves dentro de Belfast donde se respirara un ambiente republicano (católico) y otro unionista (protestante). Escogimos para el primero Falls Road, haciendo la primera parada junto a los famosos murales que hacen esquina con la Northumberland Street.
En estos murales no sólo se recuerda al conflicto del Úlster, sino también otros como el Palestino o el de Euskadi, habiendo también de temáticas diferentes. Mientras observamos estos murales, vemos como de vez en cuando aparcan aquí taxis negros (típicos “cabs” británicos) con algunos turistas, donde el conductor les explica posteriormente algo sobre los murales. Según la guía Lonely Planet, pasear por las zonas del conflicto en Belfast en un cab atendiendo a las explicaciones del taxista, es una de las más requeridas actividades turísticas de Belfast.
Después dimos un paseo por el barrio republicano, llegando a la zona de separación con el barrio protestante, donde se pode observar la delimitación entre ellos, con puertas y muros como en la calle Townsend Street.
Para ver el barrio unionista escogimos la Shankill Road, muy cerca de la Falls Road republicana. Lo primero que nos llama la atención en esta calle, es la gran cantidad de banderas que hay por todas partes (en los edificios, en las farolas, sobre la calle…), como si se estuviera celebrando una fiesta, aunque supongo que estarán allí todo el año. Lógicamente, esas banderas eran británicas. Se pueden ver también varios murales sobre el conflicto.
Cuando acabamos el paseo por la Shankill Road, salimos de Belfast hacia el norte en busca de alguna localidad en la costa donde pasar la noche. Llegamos hasta Ballycastle, donde encontramos una especie de Hotel – B&B (Corratavey , http://www.corratavey.co.uk/) que tenía cocina (muy importante para los que, como yo, no les gusta mucho lo que se come por estas tierras).
Después de cenar, tomamos unas cervezas en un pub donde escuchamos por primera vez en este viaje música en directo, rodeados de un ambiente único. Esto se iba a convertir casi que en una rutina los siguientes días. Claro está que, aunque bajo administración británica, esto ya es Irlanda.
-Gastos pagados en el día: (En total 140.54£ más 158.88€)
Ard Choiller Guest House, Portpatrick: 60£
Supermercado (Stranraer): 2.64£
Supermercado (Ballycastle): 4.40£
Hotel – B&B Corratavey, Ballycastle 60£
Cervezas: 13.50£
Ferry Stranraer – Belfast: 154.5€
Otros: 4.38€
-Km recorridos en el día: 143 km
12 DE AGOSTO: EL DOMINGO SANGRIENTO DE DERRY
Ballycastle – Calzada del Gigante – Derry – Dunfanaghy
Teníamos claro que queríamos ver dos cosas en el día de hoy: La calzada del Gigante y las calles del Domingo Sangriento de Derry; y eso es lo que hicimos. Poco después de salir de Ballycastle, estábamos ya en la Giant’s Causeway (Calzada del Gigante), una interesante formación geológica compuesta por miles de columnas de basalto que forman un paisaje muy singular, motivo por lo que fue declarada Patrimonio de la Humanidad.
Aunque la gran carga de visitantes a la que está sometida le resta encanto (se soluciona con visitarla en temporada baja), el lugar merece la pena verlo, no sólo por la formación geológica en sí misma, sino por el paisaje de los alrededores. Por cierto, la entrada es libre, pero el coste del aparcamiento (8€), es simplemente un timo.
Vista la Calzada del Gigante cogimos rumbo a Derry, donde llegamos en apenas una hora. Nos costó encontrar la Leckey Road, en el barrio de Bogside, escenario del Domingo Sangriento así como de otros sucesos ocurridos principalmente en los años 60 y 70.
Aquí, en la famosa esquina de Free Derry, entre las calles Leckey Road y Fahan Street, una pintada en el lateral de una casa advertía que se entraba en el Derry Libre, una zona que abarcaba los barrios de Bogside y Creggan autoproclamada autónoma por los católicos irlandeses, donde no podían actuar las fuerzas del ejército británico. Pero el domingo 30 de Enero de 1972, un grupo de personas que participaban en una manifestación convocada por la Asociación por los Derechos Civiles de Irlanda del Norte traspasó estos límites ante la oposición del ejército británico, que respondió disparando contra los manifestantes, resultando un total de catorce fallecidos y varios heridos. No sería hasta ya bien entrado el año 2010 cuando el gobierno británico reconoció que a los soldados de su ejército se le había dado la orden de disparar, demostrándose que además dichos manifestantes no iban armados.
En la actualidad, en este lugar queda en pie el muro de la casa de la esquina de Free Derry, entre las calles Leckey Road y Fahan Street, donde se puede leer “You are now entering Free Derry” (Estás entrando en el Derry Libre). También se pueden ver varios murales con pinturas relacionadas con el conflicto de Irlanda del Norte y un monumento a las víctimas del Domingo Sangriento.
Queríamos buscar un sitio para dormir en alguna localidad pequeña, por lo que salimos de Derry (que es una ciudad de más de 100.000 habitantes) en dirección a la costa Oeste de la Isla. Poco después de salir de Derry, dejamos la zona de la isla que está bajo administración británica para entrar en la República de Irlanda. A partir de aquí ya se utiliza el euro (¡por fin!), ya no se miden las distancias en millas… pero se sigue conduciendo por la izquierda.
Nos quedamos finalmente en un B&B en la localidad de Dunfanaghy, en la costa del Condado de Donegal (The Willows http://thewillowsdunfanaghy.com/) . Como iba a ser costumbre los días siguientes, por la noche disfrutamos de los magníficos pubs irlandeses, con músicos tocando en directo y mucha Guinness.
-Gastos pagados en el día: (En total 3.20£ más 58.7€)
Parking Calzada del Gigante: 8€
Supermercado (Derry): 3.20£
Cena (Molly’s Bar, Dunfanaghy):34.9€
Cervezas: 15.8€
-Km recorridos en el día: 182 km
13 DE AGOSTO: UN PARAÍSO PERDIDO: GLENCOLUMBKILLE
Dunfanaghy – Glencolumbkille
La verdad es que para el día de hoy no teníamos planes de visitar ningún lugar en concreto, sólo ir tirando por carreteras al lado de la costa en dirección al sur. Pero a no muchos kilómetros de Dunfanaghy (apenas 100km), encontramos un lugar que nos gustó al instante donde, cuando llegamos sobre las 11 de la mañana, decidimos pasar allí el resto del día. Cuando veía su nombre en los carteles de la carretera (Glencolumbkille, Gleann Cholm Cille en gaélico) ya me daban ganas de visitarlo, y la verdad es que el pueblo, así como los alrededores, no nos defraudaron en absoluto.
Buscamos donde dormir en un hostel con cocina (Ionad Siúl, http://www.ionadsiul.ie/) y dedicamos el día a pasear por los alrededores de la aldea, y a leer en la hermosísima playa de Trabane Strand, 7km al sur.
Sin lugar a dudas, pasaríamos aquí varios días si tuviéramos unas vacaciones más largas, disfrutando de los paisajes y de la tranquilidad que se respira en este lugar de Irlanda rodeados de pastos llenos de ovejas y conejos y de tierras donde se aprovecha la turba, donde las personas te saludan cuando te encuentran por los caminos, y donde se escucha bastante gente hablar en gaélico.
Como no podía ser menos, por la noche la aldea llenó sus pubs de gente, y los músicos tocaron en directo. No entiendo de donde salió tanta gente de un sitio tan pequeño, y mucho menos de donde salieron tantos músicos. Uno de los grupos estaba compuesto sólo por mujeres, con cinco o seis violinistas que tocaban a la vez. Igual que sucedió los dos días anteriores, todo el mundo disfrutaba del final del día en el pub mientras se tomaba unas Guinness. Pena de no quedarse aquí unos días…
-Gastos pagados en el día: (En total 136.01€)
B&B The Willows, Dunfanaghy: 65€
Hostel Ionad Siúl, Glencolumbkille : 50€
Supermercado (Glencolumbkille): 8.21€
Cervezas: 12.80€
-Km recorridos en el día: 146 km
14 DE AGOSTO: LOS PUBS DE CLIFDEN
Glencolumbkille – Clifden
Dejamos Glencolumbkille con pena, pero el viaje continúa, y seguimos hacia el sur por la costa. La mañana la pasamos en la carretera, atravesando las poblaciones de Sligo y Donegal, saliendo del coche nada más que para lo necesario. Pasado el mediodía, llegamos a las puertas del Parque Nacional de Connemara, donde comimos unos bocadillos en un bonito lugar junto al mar a un lado de la carretera, a pesar de la lluvia y el frío.
Por la tarde comenzamos buscar alguna localidad que nos gustara para pasar la noche. Roundstone fue una buena candidata, pero como estaban en fiestas no había ningún B&B libre, así que al final decidimos quedarnos a dormir en Clifden.
En Clifden la oferta de alojamientos, restaurantes y pubs es considerable, ya que está en un lugar con bastante afluencia de turistas principalmente por la cercanía al Parque Nacional de Connemara. A las afueras, aconsejo tomar la Sky Road, una carretera desde donde se pueden contemplar unos hermosos paisajes.
Una vez alojados en un B&B (Harbour Lodge, http://www.discoverireland.ie/Search-Results/Details.aspx?touristItemID=41192) fuimos a dar un paseo por Clifden y a buscar un sitio de cenar. Después de la cena nos encontramos con el habitual ambiente nocturno al que ya estábamos habituados después de estos días en Irlanda: Pubs llenos de gente de todas las edades, música en directo, y mucha, mucha Guinness. En el primer pub donde entramos las cervezas nos salieron gratis, ya que un hombre nos dio su ticket de la comida, en la que le regalaban una consumición. Más tarde, llegamos a otro pub donde un hombre con unos 60 años ya bien cumplidos, y una forma física envidiable, improvisaba los bailes de la música que se tocaba, haciendo flexiones y estiramientos de cuando en cuando, y hasta cantando cuando los músicos, con los que no tenía ninguna relación, les dejaba el micrófono. Fue un auténtico “showman” improvisado sin él saberlo, y consiguió que todos los que mirábamos su espectáculo no olvidáramos jamás ese día. Los pubs de Irlanda son inigualables.
-Gastos pagados en el día: (En total 98.54€)
Gasóleo: 56€
Cena (Mannions bar, Clifden): 24.40€
Cervezas: 13.80€
Otros: 4.34€
-Km recorridos en el día: 376 km
15 DE AGOSTO: UN DIA PERFECTO EN LAS ISLAS DE ARAN
Clifden – Islas de Aran – Carraroe
Hoy amaneció completamente despejado y hacía calor. No veíamos un día así en todo el viaje, donde el cielo estuvo siempre más o menos nublado, con algunas lluvias y la temperatura rara vez llegó a rozar los 15 grados. Decidimos pues pasar el día en las Islas de Aran, que están a poca distancia de Clifden.
Fuimos en coche hasta Rossaveel, desde donde sale el ferry hasta la mayor isla de las Aran: Inishmore. En menos de una hora el ferry nos dejó en Kilronan, la población más importante de la Isla, donde nada más llegar alquilamos unas bicicletas (10€ cada bicicleta por día).
Decidimos hacer una ruta circular para dar la vuelta a la isla, comenzando por la carretera que va en dirección al oeste al lado de la costa norte, donde en una parada llegamos a ver focas con la mitad del cuerpo al sol y la otra mitad en el agua. Nunca habíamos visto focas en su hábitat natural, por eso estuvimos un buen rato contemplándolas. Continuamos la ruta pasando por una hermosa playa donde se bañaban bastantes turistas, hasta llegar al límite más occidental de la isla, para mí uno de los lugares más hermosos de la misma, donde nos tomamos unos bocadillos mientras veíamos pasar focas.
Unas de las cosas que más llaman la atención de estas islas son las fincas esquilmadas por el uso intensivo de las mismas a lo largo de los años, quedando nada más que rocas en muchas de ellas. Desde luego la vida aquí nunca fue fácil, ya que la climatología es muy dura, con frecuentes temporales en los largos inviernos, y las tierras son muy pobres para subsistir de la agricultura. Aparte de los típicos jerséis de las Aran, también son famosas las Currach, típicas barcas que aún se usan en estas islas.
Acabamos la excursión por la isla en la costa sur, donde hay hermosos acantilados, después de pasar por el punto de mayor altitud, donde hay una buena panorámica de las islas. Fue un día perfecto, en un lugar con una naturaleza y cultura únicas, que tuvimos la suerte de disfrutarlas con un cielo completamente despejado, sin viento, y a unos 20 grados de temperatura.
Después de estar todo el día pedaleando, embarcamos en el ferry de vuelta ya bien entrada la tarde. Una vez en el coche, decidimos ir a buscar dónde dormir en algún pueblo próximo al lado del Loch Corrib, pero nos perdimos. Estuvimos tan perdidos, que tuve que preguntar en un supermercado donde nos encontrábamos, ya que nuestro mapa tiene una escala muy grande, el GPS no tiene cartografía de Irlanda, y los carteles en esta zona estaban todos en gaélico. Además, no encontramos ningún letrero que indicara el nombre de ninguna población por donde pasábamos. Así que, como ya se estaba haciendo de noche, pregunté en el supermercado si había algún sitio para dormir cerca, y muy amablemente me indicaron donde, sin mencionar el nombre de ningún pueblo, sino sólo por referencias: pasas un puente, después un árbol grande a un lado de una roca, etc…
Siguiendo las instrucciones que nos dieron, llegamos a un B&B (teach diochta uí dhomhnaill casla) en un lugar que el día siguiente me enteré que se llamaba Carraroe. Como ya era tarde, el único sitio abierto para cenar era un local de comida rápida donde daban fish and chips, hamburguesas y toda clase de fritangas basura. Después, como de costumbre, a relajarse un rato a un pub donde, por primera vez desde que estuvimos en la Isla de Irlanda, no hubo música en directo. Esa noche tampoco estábamos para mucha fiesta, ya que el cansancio de pedalear todo el día podía con nosotros.
-Gastos pagados en el día: (En total 148.06€)
B&B Harbour Lodge, Clifden: 60€
Supermercado (Clifden): 9.31€
Ferry a Aran con descuento: 40€
Alquiler de bicicletas en Aran: 20€
Cena (Carraroe): 11.60€
Cervezas: 7.15€
-Km recorridos en el día: 99 km
16 DE AGOSTO: DIA LLUVIOSO EN LAHINCH
Carraroe – Lahinch
Al contrario que ayer, hoy llovió casi todo el día. Queríamos visitar los famosos acantilados de Moher, y de camino hicimos una parada en el monasterio de Kilmacduagh. Sin duda, es un lugar interesante para visitar, sobre todo por su bien conservada torre circular, donde la población se protegía de los ataques.
Después tomamos rumbo hacia la costa para ver los Acantilados de Moher. Cuando llegamos, llovía mucho y había niebla, por lo que decidimos buscar un sitio para dormir en Lahinch, a poca distancia de allí. Encontramos un Hostel (West Coast Lodge, http://www.lahinchaccommodation.com/ ) con cocina, que ya echábamos de menos después de no poder cocinar nuestra comida desde hace un par de días.
Al final pasamos el resto del día en Lahinch protegiéndonos de la lluvia y descansando. Apenas salimos de la habitación más que para dar un paseo por el pueblo y para ver su playa, muy famosa entre los que practican el surf.
Por la noche, como de costumbre desde que llegamos a esta isla, fuimos a tomar unas Guinness a un pub donde tocaban música en directo. Esta vez nos acompañó Iratxe, una chica de Bilbo que conocimos donde nos alojamos, con la que nos sentimos muy a gusto compartiendo unas cervezas. Fue una lástima que los pubs cerraran tan temprano para nosotros, porque sino seguro que continuaríamos tomando Guinness hasta bien entrada la noche.
-Gastos pagados en el día: (En total 86,78€)
B&B teach diochta uí dhomhnaill casla, Carraroe: 70€
Supermercado (Lahinch): 5.58€
Cervezas: 11.20€
-Km recorridos en el día: 160 km
17 DE AGOSTO: BIENVENIDOS A LA “FARM HOSTEL”
Lahinch – Fenit – Killorglin
Después de salir de Lahinch hicimos una parada en Ennis para dar un paseo por el centro de la ciudad y comprar algo en un supermercado. Después continuamos hacia el sur, pasando por los alrededores de Limerick cruzando el Río Shannon, y siguiendo por la carretera de la costa hasta Tralee. A medio camino, visitamos las ruinas del Castillo de Carrigafoyle, donde se pode entrar en ellas y subir hasta el último piso.
En Tralee nos desviamos unos kilómetros hasta Fenit, para ver la Bahía de Tralee y el puerto, donde dimos un pequeño paseo.
Continuando al sur llegamos a Killorglin, donde encontramos un hostel para pasar la noche llamado Laune Valley Farm Hostel (http://www.launevalleyfarmhostel.com/index.html). Era un lugar perfecto para pasar unos días para una persona con afición a la aracnología, ya que por la gran cantidad de telarañas presentimos su presencia. La estancia sería insuperable si también tuviese afición a las antigüedades y la restauración, debido a la edad y estado de muchos muebles. Aunque nosotros no tenemos tales aficiones, decidimos quedarnos allí un par de días ya que por lo menos la casa era barata, y a estas alturas del viaje no andábamos sobrados de dinero. Además, disponía de cocina, por lo que podíamos hacer nuestra propia comida. No hace falta decir que no le tenemos miedo a las arañas.
-Gastos pagados en el día: (En total 84.98€)
West Coast Lodge, Lahinch: 60€
Supermercado (Ennis): 13.98€
Cervezas: 8€
Otros: 3€
-Km recorridos en el día: 248 km
18 DE AGOSTO: LA PENÍNSULA DE DINGLE Y EL PARQUE NACIONAL DE KILLARNEY
Killorglin – Península de Dingle – Killarney – Killorglin
Nuestro plan de hoy es visitar la Península de Dingle y la ciudad de Killarney, junto con su Parque Nacional. Lo más hermoso de la Península de Dingle es su paisaje, especialmente en su extremo cerca de las Islas Blasket y, al sur, la gran playa de Inch. Por el contrario Dingle, la mayor localidad de la península, para nosotros no tuvo nada de interés.
Tras rodear la península nos dirigimos a la famosa ciudad de Killarney. Allí, dimos un paseo por el centro y la verdad es que nos decepcionó un poco, teniendo en cuenta lo que habíamos escuchado hablar de ella. Lo que sí nos gustó mucho fue el Parque Nacional de Killarney. Es un lugar muy hermoso, con varios lagos entre montañas y mucha vegetación, donde se pueden hacer rutas de senderismo, en bicicleta e incluso se pueden alquilar coches de caballos. Dentro del parque también se puede visitar el Castillo de Ross.
Estuvimos paseando por el Parque Nacional entre el Lago Leane y los bosques unas horas, hasta que casi se nos hizo de noche.
Después, de vuelta a Killorglin, fuimos a tomar una cerveza a un pub como de costumbre, aunque, tanto este día como el anterior, no encontramos ningún pub con música en directo. La verdad es que Killorglin, para no ser una población muy pequeña, nos pareció una localidad muy solitaria por la noche.
-Gastos pagados en el día: (En total 70.24€)
Gasóleo: 54.01€
Supermercado (Killarney): 6.73€
Cervezas: 8€
Otros: 1.50€
-Km recorridos en el día: 219 km
19 DE AGOSTO: EL “RING OF KERRY”
Killorglin – Península de Iveragh – Kenmare
Asegurándonos de que no llevábamos ninguna araña con nosotros, salimos de Killorglin con la intención de recorrer el Ring of Kerry, que no es más que rodear la Península de Iveragh.
La parte más occidental de la Península de Iveragh es para mí la más hermosa, especialmente la Isla de Valentia y la Bahía de St. Finnans, desde donde se pueden ver a lo lejos las Islas Skelling, que albergan un convento cristiano del siglo VI y una población importante de frailecillos y alcatraces.
Después de hacer una parada en Sneem, completamos la vuelta al Ring of Kerry en Kenmare, donde decidimos quedarnos a dormir, ya que nos gustó mucho cuando pasamos por la carretera y además parecía que tenía bastante ambiente. En el primer B&B que preguntamos para pasar la noche nos querían cobrar 100€, así que salimos disparados de allí a pesar de que la propietaria nos aseguraba que en ese pueblo no encontraríamos un B&B más barato. A pocos metros de distancia preguntamos en otro que, para mí era más o menos similar que el anterior, o incluso mejor, y nos salía a 65€ (aunque al final nos cobró 60€ porque tomamos un desayuno continental en vez que el irlandés), por lo que quedamos a dormir allí (B&B Melrose, http://www.melrosekenmare.com/page2.html).
Desde luego que no nos equivocamos al escoger Kenmare para pasar la noche, ya que hay muchos pubs con mucho ambiente y mucha música en directo. En uno de ellos incluso un tipo nos invitó a unos chupitos. La verdad es que teníamos ganas de fiesta después de dos días tranquilos en Killorglin.
-Gastos pagados en el día: (En total 130.24€)
Laune Valley Farm Hostel , Killorglin (2 noches): 80€
Supermercado (Sneem): 2.24€
Cena (McCarthy, Kenmare): 20€
Cervezas: 28€
-Km recorridos en el día: 181 km
20 DE AGOSTO: LA ÚLTIMA GUINESS DEL VIAJE
Kenmare – Península de Beara – Baltimore – Kinsale
Así como dos días antes rodeamos la Península de Dingle, y el anterior la de Iveragh, hoy nos toca la Península de Beara. Como en el caso de Dingle e Iveragh, la zona que más me gustó fue su extremo más occidental, aunque toda la península es hermosa.
Como las dos anteriores, Beara también acaba con islas en su extremo, en este caso con la Isla de Dursey, donde un curioso aparato similar a un teleférico con capacidad para unas pocas personas y una vaca (eso vi en alguna guía), permite acceder a los turistas y a los poco menos de diez habitantes fijos de la isla.
A partir de Dursey continuamos por carreteras de la costa ahora ya en dirección este, ya que nos encontramos en el extremo sur de la isla. De camino, hicimos una parada en el faro de Baltimore: su forma cónica me pareció muy curiosa.
Decidimos buscar un B&B para dormir en Kinsale, ya que nos gustó la población y además estaba cerca del puerto desde donde nos saldría el ferry a la Bretaña al día siguiente. Encontramos una habitación libre en el Rock View B&B (http://www.rockviewbb.com/), situado en el mismo centro. Como era nuestra última noche en Irlanda de este viaje había que despedirse en condiciones buscando los mejores pubs para tomar unas pintas de Guinness. ¿Y cuáles son esos mejores pubs?. Después de estes días en Irlanda nos hicimos unos expertos en encontrarlos. Los mejores pubs son esos donde apenas hay turistas, y la mayor parte de los clientes son autóctonos. Deben tener, como debe ser, música en directo y, como los que escuchan su música son los clientes de siempre, no le hacen mucho caso a los músicos. Esto es importante, ya que hace que los músicos actúen con más naturalidad, e incluso, como ven que eres “raro”, es decir, un turista perdido por allí, casi seguro van a ir hablar contigo, dedicarte una canción o, por lo menos, despedirse de ti cuando te vayas. Lo mismo pasa con los clientes habituales del pub, que se fijan más en ti ya que eres la “novedad” de esa noche. Estuvimos un buen rato en uno de estes pubs tomando las últimas Guinness del viaje.
-Gastos pagados en el día: (En total 113.34€)
B&B Melrose, Kenmare: 60€
Supermercado (Castletainbere): 5.44€
Cena (kieran’s Folkhouse Inn, Kinsale): 26.70€
Cervezas: 21.2€
-Km recorridos en el día: 282 km
21 DE AGOSTO: EL “PONT AVEN”
Kinsale – ferry “Pont Aven”
El ferry sale a las cuatro y media de la tarde desde Ringaskiddy, a pocos kilómetros de Kinsale, así que tenemos tiempo para aprovechar la mañana dando un paseo por Kinsale y visitar el castillo de Charles Fort.
Puntual, poco antes de las cinco, el ferry ya estaba navegando en frente de la ciudad de Cobh, regalándonos una panorámica de la misma.
De esta vez, tenemos que pasar bastantes menos horas en el barco que en el de Bilbo a Portsmouth, 14 horas frente a las 29 del ferry anterior, aunque hacemos más o menos las mismas cosas: pasear por el interior del barco, ver el mar desde la cubierta y leer en el camarote. Este ferry, llamado Pont Aven, es más moderno que al anterior y, para mí, pienso que más grande y rápido también. Tiene, incluso, una piscina aceptable dentro de una de las cubiertas superiores. El billete para dos personas en camarote interior (ya no quedaban plazas en camarotes exteriores) y el coche nos salió en 395€.
-Gastos pagados en el día: (En total 511.54€)
B&B Rock View, Kinsale: 60€
Supermercado (Kinsale): 7.79€
Pizza (Carrigaline): 6€
Gasóleo: 41€
Ferry Cork – Roscoff: 395€
Otros: 1.75€
-Km recorridos en el día: 61 km
22 DE AGOSTO: CROISSANTS, GALLETES, CAFÉ AU LAIT
Ferry “pont aven” – Roscoff – Punta de St Mathieu – Audierne
El ferry llegó a Roscoff a la hora prevista: las 7:30. Nada más llegar a tierra lo primero que hacemos es buscar un lugar donde desayunar en Roscoff, a ser posible unos cruasanes. Y así hicimos. Nos tomamos unos buenos cruasanes, que ya tanto echábamos de menos después de tantos días.
Después de dar un paseo por Roscoff, continuamos en dirección a la Punta de St. Mathieu por carreteras siempre al lado de la costa, contemplando los hermosos paisajes bretones.
Hicimos una parada en Le Conquet y en el faro de St Mathieu, y a partir de ahí nos llovió lo que nos quedó de día. Continuamos hacia el sur siempre por la costa hasta que decidimos quedarnos a dormir en Audierne, cerca de la ciudad de Quimper. Audierne, así como la próxima Punta de Raz, ya las conocíamos de otros viajes por la Bretaña francesa, donde nos gusta regresar siempre que podemos. Para pasar la noche buscamos una habitación en una “chambre d’hôtes” ,una especie de B&B pero a la francesa, que es un tipo de alojamiento donde acostumbramos a dormir siempre que viajamos por Francia, ya que suelen ser baratos, con desayuno y con un trato muy familiar (Vent d’ailleurs, http://www.vent-dailleurs.yo/).
Ya por la noche, y después de tantos días comiendo la terrible comida de las tierras que acabábamos de visitar, casi nos caían las lágrimas mientras cenábamos en una crepería unas galettes, una especie de filloa de trigo sarraceno típica de la Bretaña y muy famosa en toda Francia. ¡Por fin volvíamos a comer bien después de tantos días!
-Gastos pagados en el día: (En total 51.8€)
Desayuno (Roscoff): 5.95€
Cena (Aux Crepes d’or, Audierne): 28.70€
Cervezas: 9€
Otros: 8.15€
-Km recorridos en el día: 286 km
23 DE AGOSTO: “ALBATROS”
Audierne – Pont-Aven – Port-Navalo – La Roche-Bernard
Continuamos por el sur de la Bretaña hacia el este, para ir haciendo el camino de regreso a casa. Lugares bretones tan famosos como Concarneau, Carnac o Quiberon ya son conocidos para nosotros de otros viajes, pero no Pont-Aven, que aprovechamos para visitarlo al quedarnos de camino.
Otro lugar que no estuvimos en otros viajes por la Bretaña y que decidimos visitar fue la parte este del Golfo de Morbihan, llegando hasta la localidad de Port-Navalo. Esta zona no nos gustó mucho, por lo que continuamos nuestro camino hasta La Roche-Bernard, que nos pareció más bonito y tranquilo.
Nos quedamos a dormir en el Auberge des Deux Magots (http://www.auberge-les2magots.com/EN/index.php), en una plaza del mismo centro de La Roche-Bernard.
Después de un paseo por la localidad y el puerto, volvimos a cenar las típicas galettes (también las tomamos al mediodía) en una crepería. Para acabar el día estuvimos de cañas por La Roche-Bernard donde conocimos a Greg, con el que estuvimos junto a otra gente tomando algo hasta bien entrada la noche. Aun hoy continuo sin saber por qué cuando decíamos que éramos gallegos uno de ellos no paraba de repetir la palabra “albatros” (y el albatros no es que sea un pájaro muy común en nuestra tierra).
-Gastos pagados en el día: (En total 110.6€)
Chambre d’hôtes Vent d’ailleurs, Audierne: 47€
Comida (La fregale, Guidel): 21.50€
Cena (Crêperie de la Roche, La Roche-Bernard): 27.60€
Cervezas: 14.50€
-Km recorridos en el día: 298 km
24 DE AGOSTO: HACIENDO KILÓMETROS
La Roche-Bernard – San Vicente de la Barquera
Aunque habíamos pensado pasar por lo menos un par de días más en Francia, muy a nuestro pesar, y por motivos ajenos a nosotros, tuvimos que adelantar camino hasta algún lugar cerca de casa. Así que, algo resacosos después de la fiesta del día anterior, salimos de La Roche-Bernard después de tomarnos un cruasán de desayuno. Después, hicimos los más de 800km. hasta San Vicente de la Barquera haciendo sólo las paradas necesarias. Llegamos ya de noche, y escogimos para dormir en el mismo sitio que estuvimos en el regreso del viaje al Cabo Norte del año anterior, el Azul de Galimar (http://www.hotelazuldegalimar.es/), pero en este caso quedamos en el hostal, que es más barato y más que suficiente para nosotros.
Como aún después de dos días en Francia comiendo bien no nos es suficiente para olvidar la comida escocesa e irlandesa, tomamos unas buenas raciones de cenar. No hay que excederse mucho, ya que mañana en Asturias continuaremos comiendo como tanto lo echábamos de menos unos días atrás.
-Gastos pagados en el día: (En total 240.56€)
Auberge des Deux Magots, La Roche-Bernard: 60€
Supermercado (La Roche-Bernard): 16.41€
Gasóleo: 82€
Peajes: 39.65€
Cena (Bar Folia, San Vicente de la Barquera): 28.7€
Otros: 13.2€
-Km recorridos en el día: 882 km
25 DE AGOSTO: ALARGANDO EL VIAJE
San Vicente de la Barquera – Ídolo de Peña Tú – Coto Carcedo – Puerto de Vega – Castropol
Hoy por la mañana sabemos que al final podemos estar un día más de viaje, así que, aunque estamos cerca de la casa, intentaremos pasar otra noche por el camino y así ir con más calma. Poco después de salir de San Vicente, ya en Asturias, visitamos el Ídolo de Peña Tú, que es un conjunto megalítico con grabados y pinturas. Desde el aparcamiento(al lado de la N-634) hasta el ídolo hay un camino que se recorre en pocos minutos. Una vez allí, un guía explica gratuitamente el significado de los grabados.
Como de costumbre siempre que pasamos por Asturias, hay que comer el típico cachopo (http://es.wikipedia.org/wiki/Cachopo). Uno de mis favoritos es el del Bar Parrillada Vistamar, en Coto Carcedo (Concejo de Castrillón, muy cerca de Avilés).
Luego, después de una parada en Luarca, buscamos donde dormir en Puerto de Vega (cerca de Navia), pero estaba todo ocupado o con precios muy altos, por lo que continuamos hasta Castropol.
En Castropol dormimos en un hotel al lado de la N-640 (Casa Vicente) y cenamos unas sardinas al lado del puerto.
-Gastos pagados en el día: (En total 128.4€)
Hostal Azul de Galimar, San Vicente de la Barquera: 65€
Comida (Parrillada Vistamar, Coto Carcedo): 22€
Cena (Mesón La Santina, Castropol): 32.30€
Cañas: 6.20€
Otros: 2.90€
-Km recorridos en el día: 267 km
26 DE AGOSTO: LA LLEGADA
Castropol – Foz – Lugo
Con pena porque ya no podemos alargar más el viaje, iniciamos al regreso al lugar de donde salimos treinta días atrás. De todas formas, aun aprovechamos la mañana para dar un paseo por la Praia das Catedrais y por Foz, donde comimos unas raciones. Por la tarde, llegada a Lugo. Como de costumbre, todo este mes viajando se nos pasó tan rápido que casi no nos dimos cuenta. Por supuesto, y como en casi todos los viajes que hicimos, lo volveríamos a repetir el día siguiente de la llegada.
-Gastos pagados en el día: (En total 82.6€)
Hotel Casa Vicente, Castropol: 55€
Comida (Cervecería Barrilete, Foz): 24€
Otros: 3.60€
-Km recorridos en el día: 134 km
TOTAL DEL VIAJE:
– Gastos: 4345€ (2172€ cada uno)
– Kilómetros: 7609km (254km de media en 30 días de viaje)
FIN.
Se deseáis más información podeis escribir a cabonorte2009@hotmail.es
GUIA DEL VIAJE
Documentación:
Tanto Reino Unido, como Irlanda y Francia pertenecen a la Unión Europea, por lo que el único requisito de entrada en estos países para ciudadanos de la UE es que lleven su DNI. De todas formas, no está de más llevar el pasaporte.
Fronteras:
En algunos sitios son prácticamente inexistentes, como por ejemplo entre Irlanda y el Reino Unido. Lo único que pueden controlar en algunas de ellas puede ser que no nos pasemos de la cantidad de alcohol o tabaco permitido.
Seguridad personal:
Todos estos países son muy seguros, así que la única norma de seguridad a seguir es la del sentido común: no dejar dinero ni objetos de valor a la vista en el coche, vigilar la cartera y mochila en aglomeraciones, etcétera…
Urgencias sanitarias:
Para agilizar los trámites en caso de una urgencia sanitaria en estos países, se recomienda llevar la Tarjeta Sanitaria Europea, que cualquier beneficiario de la seguridad social la pode pedir gratuitamente en las oficinas de la seguridad social. En muchas oficinas las dan el momento.
Hace falta llevar además ciertos medicamentos de uso corriente para la diarrea, estreñimiento, paracetamol, alcohol, agua oxigenada,…
Comunicaciones:
La cobertura de móviles es muy amplia en estos países. En algunas compañías puede ser preciso llamar al servicio de atención al cliente por si hay que activar algo para llamar desde el extranjero. Nosotros llevábamos dos móviles, uno de contrato y otro de tarjeta y de dos compañías distintas, que funcionaron sin problemas. También es recomendable informarse qué compañías tienen tarifas más baratas en estos países para así escoger desde nuestro móvil la compañía más económica (con selección del operador manual).
A veces es recomendable buscar acceso a internet para hablar con la familia (y ahorrar dinero en llamadas), buscar alojamiento, información turística, etc… Nosotros llevamos un ordenador portátil y encontramos distintas redes wifi por el camino en los alojamientos, bares,… En Francia siempre queda el truco de ir a un Mc Donalds a tomar por lo menos un refresco, ya que allí todos tienen wifi gratuita. Si no lleváis ordenador, siempre se pode encontrar un cíber o una biblioteca pública.
Información turística:
En muchas de las localidades que visitamos cuentan con oficinas de turismo donde proporcionan información turística gratuitamente. Nosotros nos informamos antes del viaje de muchos de los lugares turísticos por medio de guías de viaje e internet. Además, llevábamos con nosotros varias guías de países, algunas nuestras y la mayoría prestadas gratuitamente por bibliotecas públicas.
Dinero:
Conviene llevar dinero en metálico y en tarjeta. El dinero en metálico no se debe guardar todo junto, sino en lugares separados, para evitar robos y pérdidas. Francia e Irlanda utilizan el euro, pero no en el Reino Unido. Nosotros llevábamos algunas libras en metálico que cambiamos antes de salir de viaje. También sacamos algunas más en un cajero automático que nos dio problemas, como cuento en el diario del viaje. Según me han comentado, hay algunos lugares en Inglaterra o en el Ulster donde no aceptan libras escocesas y viceversa, aunque nosotros no tuvimos problemas en este sentido.
Se debe llevar además varias tarjetas, mejor las de crédito que las de débito, ya que estas últimas no las aceptan en algunos lugares (peajes de Francia o en la compañía de ferries Brittany Ferries, por ejemplo). Visa o Mastercard como tarjetas de crédito y Visa Electron y Maestro como de débito son de las más frecuentes.
Horarios:
Hay que tener en cuenta que los establecimientos de estos países siempre cierran antes que aquí, por lo que muchas tiendas sobre las 5 y media de la tarde ya están cerradas. Excepcionalmente, en Irlanda he visto supermercados abiertos hasta casi las 10 de la noche, incluso en domingo. Los restaurantes y bares igual, por lo que conviene adelantar la hora de la comida y de la cena. Esto también es importante a la hora de buscar alojamiento, especialmente en localidades pequeñas.
Hay que destacar que tanto en el Reino Unido como Irlanda se debe retrasar una hora el reloj.
Dónde dormir:
En estos países hay muchas posibilidades de alojamiento en cantidad y calidad, desde lujosos hoteles hasta campings y albergues. En el Reino Unido e Irlanda es muy común alojarse en casas particulares donde te alquilan una habitación e incluyen el desayuno del día siguiente, conocido con el nombre de Bed and Breakfast (B&B). Hay muchísimos y en casi todas las localidades. Suelen estar señalizados en la carretera (muchos hasta ponen en un cartel si tienen habitaciones libres, vacancies, o está completo, no vacancies), aunque también se pueden localizar en las oficinas de turismo, en internet, etc… Se pueden encontrar caras y baratas, aunque el precio medio ronda las 60-65 libras en el Reino Unido y los 60-65 euros en Irlanda. Los desayunos suelen ser muy completos, pudiendo elegir en casi todos entre el desayuno típico de las islas (huevos, tocino, habas, salchichas, tomate, …) o el continental. Pero lo mejor de este tipo de alojamiento es, sin duda, el trato familiar.
Hace falta destacar que en los cuartos de baño de las habitaciones donde dormimos en las islas tienen un sistema en las duchas un poco extraño para nosotros, ya que se maneja con una especie de interruptor donde también se regula la temperatura, puesto en marcha previamente con otro interruptor que por lo general está en el techo y tiene forma de cordel. Por otro lado, se precisa un tiempo para acostumbrarse al funcionamiento de las cisternas.
Aparte del B&B, también se puede dormir en hoteles, hostels (una especie de hostales), albergues o campings, aunque este último no lo recomiendo ya que en estas islas llueve bastante, y por la noche suele hacer bastante frío. Por esta razón nosotros sólo acampamos una noche.
No se debe olvidar al entrar en las islas un adaptador de enchufes, ya que allí se utilizan de tres clavijas planas.
En Francia recomiendo la más o menos versión francesa del B&B: la chambre d`hôtes. Aunque las hay de muchas categorías y precios, hemos dormido en ellas incluso por 40€ la noche con desayuno en temporada baja. También se puede dormir barato en las cadenas de hoteles tipo Formule 1, Ibis, etc…
Dónde comer:
Personalmente, considero la comida del Reino Unido e Irlanda bastante mala y poco saludable, por lo que recomiendo siempre que sea posible buscar un alojamiento con cocina. En las localidades más grandes siempre se puede encontrar algún restaurante con comida de mejor calidad. Si de todas formas se decide comer o cenar como la mayor parte de los nativos, acudiremos a un pub o a diversos locales de comida rápida para tomar fish and chips, pizzas, y todo tipo de fritangas.
En Francia la cosa es bien distinta. Hay muchos tipos de restaurantes y en muchos de ellos tienen menús a escoger a precios interesantes. Particularmente, yo recomiendo comer de vez en cuando en unas de las típicas creperías.
El vehículo:
Para rodar por las carreteras de estos países se debe llevar el permiso de circulación del vehículo, el recibo del seguro y se recomienda también la carta verde del seguro. No está de más pedir en la compañía de seguros un parte europeo de accidente. Si el vehículo no lleva distintivo del estado en la placa de matrícula, debe colocar una pegatina identificativa.
Teniendo en cuenta que las luces del vehículo del continente no están adaptadas para circular por la izquierda, se recomienda pegar una pegatina en los faros para que no deslumbren a los que nos cruzamos en sentido contrario. Yo las compré en una tienda del ferry que nos llevó la Portsmouth.
Respeto al combustible se puede encontrar en todos estos países gasolina sin plomo y gasóleo en todos ellos sin problemas, eso sí, más caros. En Francia es recomendable repostar en gasolineras de los centros comerciales, algo muy habitual allí, ya que el ahorro respeto las estaciones de servicio de las autopistas es considerable. Ninguna de las gasolineras donde repostamos tenía servicio atendido, como es común en estos países.
Conducir:
Como todos sabemos, tanto en el Reino Unido como en Irlanda se conduce por la izquierda. Al principio parece difícil, especialmente en las rotondas, pero debo reconocer que me adapté bastante bien.
Se debe comprar un buen mapa de carreteras. Con el objetivo de no andar con varios mapas, utilizamos el mapa de Europa de Michelín, que ya lo hemos utilizado en otros viajes y estamos acostumbrados a él. A veces resulta interesante tener alguno más de una zona en concreto con una escala más detallada; nosotros para eso usábamos los mapas de las guías. Aparte teníamos un G.P.S. con mapa de Europa de Viamichelín, sin actualizar desde el 2006, aunque no incluía Irlanda. Aunque no es infalible, sí sirve de gran ayuda.
En las Islas, tanto las distancias como los límites de velocidad se miden en millas y millas por hora respectivamente, cosa a la que sí me costó adaptarme. En el caso de los límites de velocidad llevaba pegada una nota en el salpicadero con los límites más comunes de millas por hora pasados a kilómetros por hora. Suelen ser de 30mph (48km/h) en ciudad, 60mph (96km/h) en carretera y 70mph (112km/h) en autopista.
El estado de las carreteras principales en Escocia es bastante bueno, aunque no se puede decir lo mismo de las menos transitadas, como las del más al norte. Algunas de estas son muy estrechas y llenas de “passing place”, que son pequeños ensanchamientos donde esperar a que pase el vehículo con el que nos cruzamos en las carreteras donde no cogen los dos a la vez. Circular muchos kilómetros por este tipo de carretera puede ser desquiciante. En Irlanda el estado de las carreteras es bastante peor, especialmente en las zonas más lejanas.
En Francia son muy frecuentes las autopistas de peaje, muy buenas pero caras. El límite máximo en ellas es de 130 km/h pero con humedad baja hasta 110 km/h. Hay bastantes radares, unos señalizados y otros no. Los conductores suelen cumplir escrupulosamente con los límites de velocidad.
Aparcar:
Para aparcar en las ciudades hay dos opciones: O buscar un aparcamiento subterráneo (más cómodo, seguro y caro), o buscar una zona de aparcamiento público en la calle. En este último caso, buscar dónde aparcar suele ser difícil, perdiendo a veces mucho tiempo en buscar un sitio libre. Hace falta, además, llevar dinero suelto para los parquímetros, y controlar su límite de tiempo.
Se deseáis más información podéis escribir a: cabonorte2009@hotmail.es